viernes, septiembre 15, 2006

Pobre animal, y pobre perro

Son muchos los que hablan del video del maltratador del perro en Galicia. Las imágenes no tienen desperdicio alguno. Bueno, perdón, sólo tienen uno, y lleva una chaqueta verde y un palo en la mano.



La crueldad humana no tiene límites. Y cada día nos convecemos más de eso. Hemos visto salvajadas a todos los niveles, pero nunca dejan de ser eso, salvajadas. Será cuestión de preguntarnos de qué material estamos hechos. Y espero que no todos del mismo. De cabrones (sí, leyeron bien: CABRONES = adj. coloq. Dicho de una persona, de un animal o de una cosa: Que hace malas pasadas o resulta molesto) está el mundo lleno. No hace falta poner las noticias para ver la cara de alguno de esos. Basta con mirar alrededor, en la calle, en tu edificio, o en tu propia universidad... Así es.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Lo que es una verdadera pena es que el perro no se revolviera y le metiera un bocao en las pelotas desgarrándonle el escroto a ese cabronazo...