Si quieres bailar conmigo has de saber que soy torpe, pero puedo aprender. Has de saber que soy lento, pero soy como soy. Intentaré seguir tus pasos, pero no prometo ser el mejor alumno. Intentaré ser tú, pero sólo si me dejas serlo.
Si quieres bailar conmigo has de saber que no soporto que me dirijan, pero podemos deslizarnos juntos. Podemos ser uno sólo si tu quieres.
Si quieres bailar conmigo préstame atención, escúchame bien, y pisa fuerte al compás que marcamos por dentro. Pero, por favor, no hagas que deje de latir.
Ahora bien, si no quieres bailar conmigo deja de mirarme. Deja de jugar. Deja esto que no nos hace más que daño. Si no quieres bailar conmigo dímelo, a veces resulto lo suficientemente tonto como para no comprender las evidencias.
Si no quieres bailar conmigo, has de saber que mi dolor es mayor. Pero soy fuerte. Has de saber que puedo encajar golpes como ninguno. Has de saber que, aunque no quieras bailar conmigo, aún tienes mucho que enseñarme. Aunque no quieras bailar conmigo, moriría por aprender. Pero sólo si tu quieres hacerlo.
lunes, octubre 23, 2006
Si quieres bailar conmigo
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1 comentario:
Incluso explicando el funcionamiento de la vida a según que gente tienes estilo..
Nunca leí una declaración de intenciones tan sumamente elegante.
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